Las tormentas de granizo dañan edificios, cultivos, automóviles y más, lo que causa miles de millones de dólares en pérdidas económicas.
Sin embargo, más importante que las pérdidas económicas son las personas. Ya sea un arquitecto, contratista, propietario de un edificio o ciudadano de todos los días, su primera línea de defensa contra el granizo siempre será el techo por encima de su cabeza. Diseñar y construir con componentes que ofrezcan el nivel adecuado de protección contra granizo no es solo un negocio inteligente. Es un negocio seguro.
“Durante la última década, las pérdidas aseguradas anuales promedio debido al granizo se estiman en $8–13 mil millones en los EE. UU., y las pérdidas han aumentado drásticamente en las últimas décadas”, informa un estudio publicado en Nature Research, una revista internacional líder.
A medida que la gravedad y la frecuencia de las tormentas de granizo han aumentado, las compañías de seguros, construcción y techos han respondido en consecuencia para ayudar a guiar a las partes interesadas en el diseño, la construcción y la reparación de techos que proporcionan el nivel de protección adecuado para las zonas más propensas a granizo en los Estados Unidos.